- Al cierre de julio, la cartera bruta del sistema bancario continuó acelerándose y registró un saldo de COP520,1 billones, una expansión de 0,8% frente a junio, completando así seis meses consecutivos de crecimiento.
- En este orden de ideas, la utilidad neta de los bancos presentó una fuerte expansión de 133,7% mes a mes, y de 376,9% año corrido, en concreto, registraron una utilidad neta de COP2,2 billones durante julio.
- En julio, el sistema bancario reportó un ROE de 10,75%. Aunque significó una leve contracción de 2 puntos básicos mes a mes, se mantiene en niveles observados antes de la coyuntura, y en línea con la tendencia positiva presentada desde marzo de este año.
En julio tanto el saldo de cartera como el ritmo de desembolsos continuaron exhibiendo una dinámica positiva, que da cuenta de cómo la recuperación generalizada de la economía viene favoreciendo a los establecimientos de crédito.
Entre tanto, la cartera vencida mantiene una evolución favorable, que sigue haciendo posible la reducción del saldo de provisiones, aunque todo en magnitudes menores a los movimientos de meses previos. Luego, las tendencias predominantes en los agregados son de estabilización, tal como viene sucediendo también con los indicadores de rentabilidad.
Entre los segmentos, el comercial fue el único en donde el saldo de vencimientos creció ($189 mil millones), mientras en los demás se redujo lo suficiente para compensarlo: consumo en $165 mil millones, hipotecario en $27 mil millones y microcrédito en $6 mil millones. Se puede considerar que son movimientos moderados para el estándar que se ha vivido en medio de la coyuntura sanitaria y que no implica cambios significativos en el riesgo al que está expuesto cada segmento.
Fuente: Investigaciones Económicas Banco de la República – Informe Sectorial